En una apuesta por la dignidad, la cultura y la autonomía de las comunidades indígenas, el Gobierno Nacional dio inicio al proyecto “ICHITKI”, una iniciativa de vivienda rural dirigida a familias Wayuu afectadas por la ola invernal de 2010-2011.
El proyecto, liderado por el Fondo Adaptación y Fonvivienda, contempla una inversión de $23.400 millones de pesos y beneficiará a más de mil habitantes de la Alta Guajira. En su primera fase, ya fueron priorizadas 48 familias pertenecientes a rancherías como Cardón, Carrizal, Jojocito y Camino Verde.
Uno de los elementos más innovadores del programa es su enfoque de autoconstrucción híbrida, que permite a los propios beneficiarios participar activamente en la edificación de sus viviendas. Las técnicas ancestrales, como el uso del barro, se integran con estándares técnicos modernos, promoviendo así la preservación cultural y el fortalecimiento del sentido de pertenencia.
“ICHITKI no es solo un proyecto de vivienda, es una apuesta por la dignidad, la cultura y la autonomía de las comunidades Wayuu. Aquí construimos futuro con ellos, no para ellos”, aseguró Julio Báez, subgerente de proyectos del Fondo Adaptación.
Las viviendas serán construidas en terrenos colectivos, con diseños bioclimáticos que se adaptan al entorno desértico de la región. Los materiales serán locales y sostenibles, reduciendo el impacto ambiental y mejorando las condiciones de habitabilidad.
El proyecto tendrá un plazo de ejecución de 36 meses y actualmente se encuentra en su fase de planeación técnica y social. La interventoría está a cargo de Fonvivienda, entidad responsable del seguimiento y control del uso de los recursos.
Con esta iniciativa, el Gobierno busca cerrar brechas históricas en infraestructura rural, al tiempo que reconoce y valora los saberes y estructuras comunitarias del pueblo Wayuu.
